En una publicación anterior te hemos contado qué es el clima laboral y cómo fomentarlo. Sin embargo, es importante que también sepas qué tipo de clima organizacional es el que quieres promover en tu empresa; después de todo, de esto depende si el clima laboral sea positivo y provechoso o no. En esta publicación te contamos más acerca de los tipos de clima laboral, así identificarás cuál tienes, cuál quieres y si una consultora de recursos humanos puede ayudarte a alcanzarlo.
¿Qué es y cuáles son los tipos de clima laboral?
El clima laboral se refiere al ambiente psicológico y emocional en el trabajo, influenciado por el espacio, las políticas y las interacciones que impacta en la motivación y el desempeño de los trabajadores. Es esencial fomentar un clima saludable mediante políticas que respeten y apoyen el bienestar de los empleados.
A continuación, te contamos cuáles son los tipos de climas organizacionales y cómo afectan en los trabajadores.
Clima laboral autoritario
En este tipo de entorno, las interacciones son escasas y la relación se basa en una jerarquía rígida; en consecuencia, la falta de confianza y comunicación obstaculiza el desarrollo de relaciones sólidas entre la dirección y los empleados. Además, la rigidez jerárquica limita la participación y el aporte de ideas por parte de los colaboradores, lo que a su vez afecta la creatividad, flexibilidad y desarrollo profesional. Asimismo, las decisiones centralizadas sin tener en cuenta las opiniones de los diferentes equipos y áreas impiden el crecimiento y la innovación.
Clima laboral paternalista
El clima laboral paternalista se refiere a una dinámica en la cual la empresa adopta un rol paternal con los empleados, asumiendo responsabilidades más allá del ámbito laboral y mostrando un alto grado de control sobre sus vidas y decisiones. Al crear una dependencia excesiva, limita la autonomía y la capacidad de toma de decisiones de los empleados, lo que puede afectar su motivación, creatividad y compromiso. Además, puede generar una cultura de pasividad y conformismo, obstaculizando la innovación y el crecimiento. Por otro lado, también puede perjudicar el desarrollo de un ambiente de trabajo inclusivo y participativo, donde los empleados se sientan valorados y empoderados.
Clima laboral democrático
Un clima laboral democrático es aquel en el que se fomenta la participación activa de los empleados en la toma de decisiones y se promueve un ambiente de igualdad y respeto. Sus ventajas radican en la generación de mayor compromiso, motivación y creatividad por parte de los empleados, así como en la mejora de las relaciones interpersonales y la resolución de problemas. Sin embargo, este enfoque puede presentar desafíos, como una toma de decisiones más lenta, conflictos más complejos de gestionar y la necesidad de desarrollar habilidades de comunicación y participación efectivas. Con una gestión adecuada de estos desafíos, un clima laboral democrático puede generar un entorno más inclusivo y productivo para la empresa.
Clima laboral Laissez Faire
En este clima laboral el líder adopta un enfoque más liberal, permitiendo que los empleados trabajen de forma autónoma sin intervención constante. El líder establece objetivos y proporciona recursos, pero otorga gran libertad y poder de decisión a los subordinados. Esta forma de liderazgo tiene ventajas como la autonomía de la empresa en ausencia del líder, la estimulación de la creatividad y el potencial de ascenso para los empleados. Sin embargo, también presenta desventajas, como el riesgo de no alcanzar los objetivos empresariales, la generación de conflictos y una posible disminución de la productividad debido a la falta de motivación y soluciones.
¿Qué clima laboral tienes en tu organización? Fomenta el clima laboral que aliente e impulse a tus empleados y te ayude a alcanzar los objetivos de tu negocio. ¿Necesitas ayuda? En Targo contamos con especialistas que pueden orientarte.
